La Diputación Provincial de Huesca intervendrá en la mejora del tramo que da acceso al santuario barbastrense Barbastro. 11.03.2022.- La Comarca del Somontano está realizando gestiones para acometer la adecuación del tramo carretero de 2 kilómetros que conecta la N – 240 con el santuario del Pueyo en Barbastro al que peregrinan unas 40 localidades la mayoría de esta comarca, pero también de La Hoya de Huesca desde 1580.
El presidente de la Comarca, Daniel Gracia, ha mostrado en una visita al acceso al Pueyo, el estado del deteriorado firme al diputado provincial de Obras, Joaquín Monesma, y la diputada por el Somontano, Maribel de Pablo, junto con el ingeniero jefe de la Diputación Provincial de Huesca, Ramón Colom. La visita ha venido motivada por la inquietud trasladada por parte de vecinos de diferentes municipios, la Asociación de Amigos del Pueyo, ayuntamientos que peregrinan hasta el santuario y el propio Obispado de Barbastro – Monzón.
El firme se encuentra deteriorado y con numerosos baches que dificultan la circulación, fruto de la ausencia de intervenciones de mantenimiento en los últimos años. El presidente de la Comarca y los diputados han estado analizando sobre el terreno con el ingeniero de obras la mejor solución para esta vía que pasa por el recubrimiento de una capa asfáltica a lo largo de los 5 metros de amplitud del firme.
El presidente de la Comarca ya se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento de Barbastro quien como propietario de la vía deberá solicitar la actuación, y con la Asociación de Amigos del Pueyo que llevan varios años reclamando esta intervención.
El santuario del Pueyo es un icono de la religiosidad popular en la comarca del Somontano. Su construcción data de 1101, tras la aparición de la virgen al pastor de Morilla Balandrán. Tras la desamortización de Mendizabal, en 1843, un grupo de prohombres barbastrenses pujó para que el santuario quedará en manos de la ciudad. Desde entonces ha estado ocupado por varías órdenes religiosas, benedictinos, claretianos y la actual Instituto del Verbo Encarnado.
Además del fervor popular que despierta entre las gentes del Somontano, es uno de los pilares del turismo religioso en la Comarca con la Catedral de Barbastro y los museos diocesano y de los mártires claretianos, así como la colegiata de Alquézar o el santuario de Torreciudad. En este sentido, el santuario cuenta con una hospedería y restaurante inactivos desde hace años pero que podría ser un revulsivo turístico para la zona.