Se han diseñado planes de mejora individualizados, identificando oportunidades que permitan optimizar sus prácticas y reducir sus emisiones
La Comarca de Somontano, a través del Plan de Sostenibilidad Turística Saborea Guara Somontano, ha auditado a 24 productores agroalimentarios, empresas y entidades turísticas para conocer el impacto de su actividad económica en la huella de carbono a lo largo de 2023 y aportarles medidas personalizadas de mejora dirigidas a reducirla.
El presidente de la Comarca de Somontano, Saúl Pérez, y la consejera de Turismo, Pilar Lleyda, han hecho entrega de las auditorías a las empresas participantes, que incluyen informes individualizados sobre la huella de carbono emitida por sus establecimientos a lo largo del año 2023, una calculadora personalizada que les permitirá calcular ellos mismo su huella en próximos ejercicios, y unos códigos de buenas prácticas adaptados a su área de negocio.
Pérez explica que “se han diseñado planes de mejora individualizados, adaptados a las características específicas de cada empresa agroalimentaria y turística, en los que se identifican oportunidades concretas que permitan reducir su huella de carbono y optimizar sus prácticas, considerando su actividad, recursos y contexto particular. Este enfoque personalizado asegura que las propuestas planteadas sean realistas, aplicables y alineadas con las metas de sostenibilidad de cada entidad”.
Con los datos facilitados por cada una de las empresa participantes, se ha calculado la huella de carbono para alcance 1+2. Entre las empresas y entidades auditadas han emitido 694,99 toneladas de CO2e, de las que el 70% corresponden al alcance 1, es decir, emisiones directas, y el 30% restante al alcance 2, emisiones indirectas. El análisis constata que la huella de carbono es muy heterogénea, reflejando la diversidad de actividades auditadas, lo que dificulta realizar comparaciones. Por sectores, y dejando fuera a la Comarca de Somontano, que por el tipo de servicios que presta y su volumen es la que mayor porcentaje aporta a las cifras globales, las empresas de elaboración de alimentos serían los mayores emisores, mientras que las actividades turísticas y de aventuras tendrían una menor huella, lo que se debe en buena medida a son menos intensivas en el uso de energía.
El grueso de las emisiones, un 51%, son debidas al funcionamiento de vehículos y maquinaria con motor de combustión mientras que un 15% están directamente relacionadas con sistemas de calefacción ACS y bombeo con combustibles fósiles, que actualmente tienen alternativas que consumen electricidad y son más eficientes en el mercado. Las emisiones ligadas a la electricidad (30%) son las que actualmente tienen alternativas más coste-eficientes para su reducción, y deberían ser el primer paso en los esfuerzos de los planes de mejora.
Cualquier empresa, particular o entidad puede acceder a la calculadora desde el portal https://somontano.org/pstd-saborea-guara-somontano y calcular ella misma su huella.
El proyecto también ha incluido cuatro talleres sobre el ciclo de vida como herramienta para la mejora ambiental de la empresa, el ecodiseño aplicado al sector enogastronómico y turístico, el turismo sostenible en la comarca y la accesibilidad y perspectivas de género en la empresa.
La consejera de Turismo, Pilar Lleyda, señala que esta acción del plan de sostenibilidad turística tiene una segunda parte que consiste en compensar las emisiones generadas, para lo que se están analizando diversas posibilidades como “un proyecto de plantación de árboles autóctonos en áreas degradadas o en desuso, a través del que crear corredores ecológicos que conecten hábitats fragmentados o zonas de sombra en entornos naturales y urbanos, cuyos beneficios son el secuestro de CO₂ a largo plazo, la mejora de la biodiversidad, la prevención de la erosión del suelo y el aumento de la retención de agua. Para ello, hemos solicitado a los Ayuntamientos a que nos envíen propuestas de terrenos en los que podamos implementarlo”, añade.