A la inversión de 250.000 euros, del plan comarcal de mejora de caminos que termina este año, le siguen los trabajos de recuperación de sendas cubiertas por la maleza por el desuso
La Comarca de Somontano de Barbastro está mejorando los caminos más frecuentados por los habitantes del medio rural así como recuperando los senderos tradicionales en desuso a través de dos intervenciones, una asumida con una inversión de 250.000 euros que finaliza en diciembre y otra que se va a prolongar durante los próximo cuatro meses gracias a la aprobación por parte del SEPES de un proyecto medioambiental para desbrozar senderos presentado por el ente comarcal.
Con respecto a la primera intervención, el 31 de diciembre habrán terminado los trabajos del plan de mejora de caminos comarcal llevado a cabo en coordinación con los ayuntamientos que han indicado los tramos que necesitaban acondicionar. La Comarca licitaba las obras por el citado importe de 250.000 euros que se ha distribuido por los municipios en proporción a su número de habitantes, los km2 que tiene el término municipal, así como los kms2 de caminos con los que cuenta cada población.
En estos trabajos se han llevado a cabo tareas de reparación y acondicionamiento realizadas con moto niveladora, rodillo compactador y máquina de desbroce, siguiendo las indicaciones de los ayuntamientos.
Por lo que respecta al proyecto aprobado por el SEPES, tres operarios van a realizar trabajos de limpieza y desbroce de antiguos senderos y caminos que habían quedado en desuso en las poblaciones para ser recuperados como uso turístico o para la práctica del senderismo. Los ayuntamientos eligieron aquellos senderos que consideraban como prioritarios para que los vecinos los volvieran a recorrer o de cara a su promoción turística tras una posterior señalización.
El presidente de la Comarca de Somontano, Daniel Gracia, destacaba que el plan comarcal de mejora de caminos pretende “apoyar a la agricultura y ganadería como principales actividades económicas en nuestro medio rural, ya que estos caminos se utilizan habitualmente y se necesita que estén en buenas condiciones”. Asimismo, valoraba la recuperación del patrimonio de los “senderos tradicionales para redescubrirlos y poderles dar de nuevo un uso más turístico o de ocio”.
